Jacob Ford, de 17 años, no estuvo de acuerdo con la política de Spalding Grammar School después de que se ordenó a los alumnos de sexto que no cargaran mochilas entre las clases.

La escuela declaró que se estaba causando “lesiones a los estudiantes más jóvenes” debido a las “maletas cada vez más grandes” que se llevaban sobre sus hombros.

En su lugar, se les alienta a llevar libros a mano entre las lecciones. Jacob organizó una protesta silenciosa utilizando una cesta y un horno de microondas para darle la contra a la ley.

La petición fue eliminada días después de ganar 463 firmas. Bridget Allan, que tiene dos hijos en la escuela, dijo: “Me indigné cuando me enteré de la prohibición. Creo que es ridículo. “¿Cómo puedes llegar a los lugares a tiempo con todos los libros correctos?”.

El profesor principal, Steven Wilkinson, dijo al medio llamado Spalding Today: “Los hechos que se han presentado están lejos de la imagen completa. Tenemos un estudiante que se ha comportado de una manera cada vez más inapropiada, acciones nunca antes presenciadas y que han sido sancionadas enteramente de acuerdo con las políticas de la escuela”.

“Lo que más me decepciona es el hecho de que, en lugar de trabajar con nosotros, el padre en cuestión lo ha alentado y ahora busca glorificar el comportamiento de su hijo”, finalizó el director.