Dos peregrinos que se dirigen a la Huaca de Pachacámac para venerarla y pedir por sus pueblos, castigados por la sequía y atemorizados por la posibilidad de un gran terremoto. Llevan ofrendas como spondylus y semillas de maíz. En su recorrido, pasan por muchas vicisitudes, atravesando otros templos y cruzándose con ladiones. Las ofrendas para la Huaca Principal, la única que puede salvar al pueblo, se han perdido en el camino. Pero la música y la teatralidad lo pueden todo.

Esta es la historia, de Huacas, Burbujas y Rock and Roll, espectáculo de música y malabares que está planeado como alternativa cultural y como un a opción de darle otro sentido a esos milenarios espacios que de pronto aparecen entre el moderno cemento. Desde el 15 de marzo se presentará, primero en la huaca Santa Catalina, para luego convertirse en itinerante y pasear entre huacas limeñas, hasta el 8 de junio. Estará en Huaca Palomino, Huaca San Borja, Puruchuco, Huaca Huantimarca, Huaca Huantille y Huaca Mateo Salado.  Aprovechemos esta oportunidad de redescubrir los templos antiguos de Lima.

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