El arte es una energía en constante movimiento, está en el espacio como las ideas de Platón, no tiene forma y se adapta a la percepción de quien lo captura y lo encierra en una pintura, una escultura, una melodía, etc. y aún así sigue libre, y vuelve a tomar una nueva forma en los ojos, los oídos y el pensamiento de quien lo percibe en la obra del artista. El arte es libre.

Catalogarlo en movimientos es arbitrario a su naturaleza, pero era necesario catalogar a sus artistas de acuerdo a sus influencias, estilos y temas. Muchos de estos artistas transgredieron las normas de la época, dejándose secuestrar por el arte que trataron de domar, creando obras que fueron controversiales para su tiempo, muchas de ellas a punto de ser destruidas por ‘obscenas’ o ir en contra de un pensamiento que dominaba la época. Aquí les presentamos 10 de estas polémicas obras de arte.

10. Erased de Kooning – Robert Rauschenberg

Al igual que muchos de los objetos de arte polémicos creados por el Dadaísmo, Erased de Kooning o De Kooning Borrado, no fue en realidad un dibujo nacido en las manos de quien lo firma, en este caso Rauschenberg. El dibujo y su nombre llegaron cuando Rauschenberg obtuvo un bosquejo del artista estadounidense Willem de Kooning, en gran parte borrado. Aunque el dibujo había dado mucho que hablar antes de su exposición en 1963, Rauschenberg había estado experimentando con el borrado de su trabajo durante mucho tiempo antes de que apareciera la idea de borrar ‘a otro’, transmitiendo una pregunta en la que se basó su arte ¿por qué? Esta obra, es un acto irreverente que se comete con el fin de mostrar que hay que borrar lo que nos precede porque ya no vale, porque el pasado ya es obsoleto y caduco, fuesen las obras de artistas genios o no.

9. Flag – Jasper Johns

Inspirado por un sueño que tuvo con la bandera norteamericana, Jasper Johns dio tangibilidad a su visión en Flag (1954), cuando tenía solo 24 años de edad. Considerada una obra neo-dadaísta por su recreación de un objeto familiar, la pieza fue hecha usando aceite, pintura y papel de periódico. Muchos críticos se preguntaron si era solo una pintura, o si en realidad era una bandera, originando una controversia significativa sobre esta réplica del mayor símbolo cultural de los Estados Unidos. Mientras, Johns continuó su exploración de pintado y banderas, pero ninguno de ellas logró la prominencia de su primer ‘hit’.

8. La Violación – René Magritte

Pintado por el famoso artista belga en 1935, La Violación se ve y suena como una violación. Como si se tratase de un retrato, la pintura muestra el rostro de una mujer, pero en lugar de las características familiares, sus ojos han sido sustituidos por pechos, la nariz por un ombligo y la boca por su pubis. La utilización de las ideas del surrealismo y el sentido de la metáfora como un tándem, nos orienta a una percepción de que la pintura parece ofrecer una dura opinión de cómo los hombres pueden ver a las mujeres, dejándose llevar, como lo fue en aquel tiempo y lo es en la actualidad, por su anatomía.

7. Dr. Paul Gachet – Van Gogh

Pintado en 1890 por Vincent Van Gogh, el doctor Paul Gachet no es solo un retrato revelador del propio pintor, sino la más poderosa acusación a su terapeuta. La pintura que representa al doctor Gachet, quien fue el que trató a Van Gogh tras su estancia en el hospital psiquiátrico de St. Paul, muestra al galeno con un comportamiento letárgico, con la cabeza apoyada en las manos y el rostro demacrado. Mientras que la imagen parece suficientemente clara, fue controversial por su aspecto bastante honesto sobre su visión desde la perspectiva de una enfermedad mental.

6. La Maja Desnuda – Francisco de Goya

Un desnudo, incluso un desnudo a carboncillo (a lo Titanic), no parece ser una cosa tan controversial, pero en 1803, esta obra del pintor español Francisco de Goya fue completamente impactante. Retratando la figura yacente de una mujer desnuda sobre un sofá verde de almohada, La Maja Desnuda indignó al público debido a la expresión sin complejos de la joven, que miraba descaradamente al espectador, no desviando la mirada como era común en la época. Aunque Goya fue interrogado sobre la naturaleza inflamatoria de la pintura durante la inquisición española, se las arregló para escapar sin castigo, posiblemente debido a que el trabajo había sido inspirado por artistas Vázquez y Tiziano. O sea, Hugh Hefner hubiera sido quemado en la hoguera.

5. Guernica – Pablo Picasso

Creada para la Exposición Universal en 1937 y una de las obras con más carga política y extravagante de Picasso, Guernica fue inspirada por el bombardeo nazi de la pequeña ciudad española el 26 de abril de 1937. Debido a la naturaleza monstruosa del ataque, perpetrado contra civiles desarmados, Picasso creó una pintura 3,8 × 7,5 metros como documento artístico de la tragedia, que estipula que solo podría volver a España cuando la democracia reine. Mientras que la pintura existe como una de las respuestas artísticas más conmovedoras ante la guerra, por esa razón, Picasso regresó a España en 1981, después de que el rey Juan Carlos se convirtiera en líder de la España democrática.

4. El enigma de Guillermo Tell – Salvador Dalí

Terminado en 1933 como una expresión más de estética única y surrealista de Dalí, El enigma de Guillermo Tell es una de sus más provocativas y controvertidas piezas. Representando al héroe popular Guillermo Tell con la cara del líder político ruso Vladimir Lenin, la pintura muestra al personaje arrodillado, mientras que por entre sus nalgas se extiende una extremidad, que parece fálica, apoyada en una muleta. Mientras que las interpretaciones de Dalí siempre fueron difíciles de evaluar, a sus compañeros surrealistas les pareció bastante ofensivo, de tal modo que intentaron destruir la obra cuando se expuso en el Grand Palais de París, pero lo único que se logró destruir fue la relación de Dalí con los surrealistas.

3. La imposibilidad física de la muerte en la mente de alguien vivo – Damien Hirst

Creada en 1991, es una de las piezas de arte más polémicas de los últimos años. La imposibilidad física de la muerte en la mente de alguien vivo, fue concebida por el chico malo del arte, el inglés Damien Hirst, quien formó parte del grupo denominado Young British Artists (YBA) o jóvenes artistas británicos, de principios de los años 90.

Encargado por Charles Saatchi, la pieza consiste en un tiburón tigre de 4,3 metros que fue capturado a lo largo de Queensland, Australia, preservado y mantenido en una caja de cristal. Para muchos, la pieza es “un equilibrista sobre la cuerda que divide el arte del truco”. Se mire como se mire, el tiburón tigre de Damien Hirst se ha convertido en una pieza determinante en el arte británico y una de las obras más controvertidas de la historia reciente.

2. Olimpia – Eduard Manet

Inicialmente se expuso en el French Salon en 1865 y colgado en lo alto de la pared, ya que los críticos y el público más conservador la tacharon de inmoral y vulgar, lo que provocó que algunas personas intentaran dañar la pieza. Olympia incitó una indignación similar a la que Goya había recibido 60 años antes. En Olympia puede apreciarse a una mujer desnuda recostada en una cama. Junta a ella, una sirvienta le lleva flores, y a sus pies reposa un gato. Manet se inspiró en la Venus de Urbino de Tiziano, que a su vez se inspiró en la Venus dormida de Giorgione, aunque la principal diferencia entre estas dos obras y la creada por el maestro impresionista es que él no presenta a la mujer como una diosa sino como una prostituta. Una representación indirectamente directa sobre la vida parisina de aquel entonces.

1. Fuente – Marcel Duchamp

Entre los objetos más inteligentemente consignados en el catálogo del movimiento Dada, Fuente de Duchamp creó un gran revuelo cuando apareció en 1917 en una exposición de la Sociedad de Artistas Independientes. Comenzó como un urinario que fue producido por JL Mott Iron Works, Duchamp colocó el objeto en su parte posterior, la firmó “R. Mutt “y se refirió a él simplemente como Fuente. Mientras que el original se perdió poco después de la exposición, el objeto era un ejemplo perfecto de la filosofía anti-arte del Dadaísmo y sigue siendo una de las más famosas, extrañas, y polémicas obras de arte.