Un 12 de febrero de 1949 llega al mundo , para regalarnos temas que han sido el soundtrack de madrugadas, aventuras de hotel, lágrimas, sonrisas de medio lado, solitarias risas pícaras e inolvidables resacas. Con una rima contundente como florida, salvaje como dócil, y colorida como sombría, es uno de los referentes de la música en nuestro idioma. Así, tropezándonos con una lista de la Rolling Stone española que mostraba los 10 temas preferidos por sus lectores, quisimos ir más allá, y en honor a los 15 años de uno de sus discos más importantes, el 19 días y 500 noches, quisimos llegar a las 19 canciones, sumándole al top10 rolinga, temas que pensábamos que estarían y no están. Pero aunque es imposible elegir solo 19, muchas hermosas quedaron fuera, si no encuentras tu favorita, discúlpenos y “perdonen la tristeza”.

19. Siete crisantemos – Joaquín Sabina

Como dice el mismo Sabina en otra canción, que podría explicar en algo este tema: “Esta es la canción de las noches perdidas, que se canta al filo de la madrugada…”, y ya que el significado de la letra crea discusión entre los ‘sabinólogos’, es un tema para oírlo cuando el silencio de la velada deja que hable el recuerdo empapado en licor. Aquí, el 7, el número de la suerte, se combina con infortunios, encrucijadas y memorias de un pasado del cual no vale nunca arrepentirse.

18. Quién me ha robado el mes de abril – Joaquín Sabina

Abril, mes que marca la primavera al otro lado del planeta y simboliza la juventud y los buenos tiempos, son arrancados de la vida de los personajes que protagonizan las pequeñas historias dentro de esta canción. Canción precisa para musicalizar los malos ratos.

17. La canción más hermosa del mundo – Joaquín Sabina

Una biografía a costra abierta. Cada estrofa nos narra una etapa de su vida, desde que jugaba con botones, hasta su recuperación tras sufrir un accidente cerebro vascular que puso su vida en peligro. Una retrospección sincera y bien versada, que no sé por qué – quizá lo sepas tú – empuja una lagrimilla en quien la escucha.

16. Llueve sobre mojado – Joaquín Sabina

Este es un platillo delicioso preparado en la cocina de Fito Páez, con la receta de Joaquín Sabina y donde ambos metieron mano en la sartén. Los músicos hicieron un gran álbum que los llevó a una enemistad de 10 años que ya está resuelta. Las letras se le atribuyen en gran parte a Sabina, de cuya rima se puede ver su ADN a ojo pelado. En esta un gran ejemplo.

15. Aves de Paso – Joaquín Sabina

Se han escrito grandes canciones a ese ‘amor de la vida’, al amor eterno, a la media mitad, esta no lo es. Esta le rinde homenaje a aquellas heroínas que lucharon grandes batallas de una sola noche, las que dejaron huellas en las sábanas de la memoria, pero no en el corazón. A ellas que nos regalaron una sonrisa y una historia que cantar cuando nadie te canta una canción. Salud por ellas.

14. Una canción para la Magdalena – Joaquín Sabina

Joaquín, se decide a escribir esta oda a las mujeres cuyo oficio es hacer de las fantasías realidad, del dinero compañía y del sexo un anestésico de la soledad. Y es que Sabina, sin pelos en la lengua exalta a la prostituta en una letra llena de elogios y metáforas bíblicas, acompañada por un hermoso arpegio de la música que le puso Pablo Milanés, quién además la canta junto a él en la versión del álbum en que vio la luz.

13. Por bulevar de los sueños rotos – Joaquín Sabina

Sabina cogió su pluma como cincel y talló una estatua musical de Chavela Vargas digna de un dios griego – o mejor dicho azteca -. Un bello regalo, para su amiga. Conozco a varios que comenzaron a escuchar a Chavela por esta canción de Sabina.

12. Y nos dieron las 10 – Joaquín Sabina

Una de esas crónicas rimadas que te hacen cantarlas a viva a voz. Infaltable en sus recitales y en el corazón de un sabinero. Un amor de una sola noche que dura para siempre. Pocos saben que la canción tiene una hermana salida del mismo óvulo, llamada Ojos de Gata, del grupo Los Secretos, con la que comparte las primeras líneas, pero esa ya es otra historia.

11. Y si amanece por fin – Joaquín Sabina

Antes de entrar a la lista de la Rolling Stone, teníamos que mencionar esta, que no sé por qué no está dentro de las primeras, y es que jamás me había quitado tanto el sombrero ante Joaquín, que convence a una mujer para llevársela a la cama, diciéndole todo lo contrario a lo que el manual del Casanova edición n°32 dice: “…tal vez no seas tú la mujer de mi vida”.

10. La del pirata cojo – Joaquín Sabina

Inicio rockero el de este top ten, que por supuesto refleja también la querencia del músico por los sonidos eléctricos y nombres como J J. Cale. La del pirata cojo pertenece a su octavo disco, Física y Química, editado en 1992 y que despachó casi medio millón de copias.

9. A la orilla de la chimenea – Joaquín Sabina

El puesto nueve lo ocupa curiosamente otra canción de Física y Química, pero en esta ocasión con un tempo diametralmente opuesto, pues estamos ante una de esos baladones melancólicos de emotividad descorchada en plan torrente sanguíneo infinito, sobre los que pasean versos certeros directos al centro de la diana.

8. Ruido – Joaquín Sabina

“Descubrieron que los besos no sabían a nada, hubo una epidemia de tristeza en la ciudad, se borraron las pisadas, se apagaron los latidos. Y con tanto ruido no se oyó el ruido del mar”, canta Joaquín en Ruido, de su disco Esta boca es mía de 1994.

7. 19 días y 500 noches – Joaquín Sabina

El productor Alejo Stivel (ex Tequila) lo convenció para que mostrara su voz en toda su cavernaria crudeza y, a pesar de los lógicos recelos del inevitablemente hedonista artista, terminó accediendo para sorpresa de propios y extraños. Pero es que el contenido de 19 y días y 500 noches (el disco, editado en 1999) necesitaba una voz así de rota. Y así 19 y días y 500 noches (la canción) se convirtió en un clásico del cambio de siglo.

6. Peor para el sol – Joaquín Sabina

Canalla y noctámbulo infinito como pocos, es Sabina capaz de describir en apenas una veintena de palabras esa sensación que experimentan los que desafían a la luz del sol y se dejan llevar por el magnetismo de la oscuridad: “Peor para el sol, que se mete a las siete en la cuna del mar a roncar, mientras un servidor le levanta la falda a la luna…”

5. Princesa – Joaquín Sabina

La versión que gusta Sabina de interpretar de un tiempo a esta parte en sus directos es rockera y trotona en plan Springsteen, algo de alguna manera incomprensible si se atiende mínimamente a la historia de la canción, la enésima pintura de vidas quebradas de su cancionero. Aunque lo cierto es que así suena más rabiosa y airada, actitud que, las cosas como son, le encaja a esta canción mejor que el zapato a Cenicienta.

4. Peces de ciudad – Joaquín Sabina

Perteneciente a su disco Dímelo en la Calle de 2003, esta emotiva composición caló rápidamente en el corazón de la parroquia sabinera, tal y como demuestra su posición de privilegio en este decálogo, casi acariciando la medalla de bronce. Además, en su letra hay una referencia al clásico Amsterdam de Jacques Brel, siempre reverencialmente admirado por Joaquín.

3. Calle Melancolía – Joaquín Sabina

Y entramos en el podio donde encontramos las tres canciones que a estas posiciones se han encaramado con probada solvencia, dejando muy atrás al resto. Y ahí está en el tercer lugar Calle Melancolía, un tema perteneciente al segundo disco de Sabina, editado en 1980, hace ya 35 años. Y entre las favoritas de los suyos seguirá otros 35 más, pues a estas alturas el tranvía de la alegría ha adquirido ya estatus de clásico tan inalcanzable como imperecedero.

2. Contigo – Joaquín Sabina

Las canciones del décimo disco de Sabina, Yo mí me contigo (1996), han recibido multitud de votos equilibradamente repartidos por parte de los lectores de la Rolling. Pero la letra de Contigo definitivamente está marcada a fuego en muchos de ellos, que lo que quieren después de todo, muchachas y muchachos de ojos tristes, es que mueran por ellos. Y lo que no quieren es que elijan su champú.

1. Y sin embargo – Joaquín Sabina

Sabina ha regalado al mundo multitud de canciones inolvidables a lo largo de los años. Pero todo parece indicar que 1996 fue su año más inspirado, pues no contento con colocar a Contigo en el segundo puesto, lleva a este Y sin embargo, también de su disco de aquel año, hasta el lugar de privilegio de ser la canción preferida de los lectores de la Rolling Stone española, ganando por goleada.