Si pensaste que Ben Hur, Los 10 Mandamientos o Lo que el viento se llevó, se llevaban los premios a las películas más largas de la historia del cine, te equivocas. Existen películas que llevan días para verlas, sin cortes, ni comerciales y mucho menos sin un alto para ir al baño.

Modern Times Forever (2011) es el título de la película más larga de la historia con una duración de 14 400 minutos, lo que se podría traducir en 240 horas o 10 días, y que fue proyectadas en Finlandia, en una pantalla de 40 metros cuadrados instalada en la plaza céntrica de Helsinki. El film ha sido producido por Jakob Fenger, Rasmus Nielsen y Bjornstjerne Reuter Christiansen.

La trama está basada en reflejar los desperfectos y los daños sufridos por una instalación arquitectónica a lo largo de varios años. La cinta fue un proyecto de naturaleza experimental llevado a cabo por una asociación danesa conocida como Superflex, conocido por sus obras satíricas, entre ellas “Visita de una cucaracha al Museo de Ciencia”, y la campaña que llenó de carteles la capital de Dinamarca, que decían: “Extranjeros, por favor no nos dejen solos con los daneses”.

Los Superflex fueron los responsables de efectuar una serie de planos realmente estéticos y atractivos del edificio en el que se basa la historia, el cual es sin duda el hilo conductor del argumento junto con el transcurso del tiempo y su incidencia en las personas y en las cosas que hay a su alrededor.

A diferencia de cualquier cineasta que recomendaría al público ver su película, Rasmus Nielsen, uno de los miembros de Superflex dice que “cabe la posibilidad de que te puedas perder un instante clave” de los diez días de exhibición.

Otras películas de larga duración son:

- Cinématon (150 horas)

- Matrjoschka (95 horas)

- The Cure for Insomnia (87 horas)

- The Longest Most Meaningless Movie in the World (48 horas)