Almeda Hardwick encontró el amor en el lugar poco común, en una pizzería para niños. Apenas miró a su futuro esposo Gary, supo que quería pasar el resto de su vida con él, que tiene 19 años, mientras ella tiene 72.

La pareja, que ahora vive junta en Tennessee, se llevaba bien y solo dos semanas después de su encuentro casual en “Chuck-E-Cheese”, Gary hizo la pregunta y le pidió a Almeda que fuera su esposa.

Gary se enamoró de Almeda, a pesar de que uno de sus nietos es mayor que él.

Gary señaló a Barcroft TV: “Lo primero que me atrajo de Almeda fueron sus hermosos ojos azules, y su personalidad. Ella siempre está llena de risas y nos conectamos muy bien. La química fue genial”.

Afortunadamente para los dos, Almeda siente casi lo mismo por él. Ella dice que la diferencia de edad no les importa. “Si amas a alguien, la edad es solo un número”, señala la abuela.

A pesar de los 53 años que los separan, Gary no cree que sean tan diferentes al fin y al cabo: “Nunca me he sentido atraído por las mujeres más jóvenes. Incluso cuando tenía 13 o 14 años, siempre he tenido una atracción por las mujeres mayores y cuando le conté a mi abuela que me crió, no sabía cómo lo tomaría, pero nos aceptó”, expresa Gary.

“Mucha gente espera años para casarse y todos tienen diferentes opiniones sobre casarse rápidamente. Pero sabíamos que estábamos enamorados, así que salté sobre eso”.

“La primera vez que hicimos el amor fue en nuestra noche de bodas. Fue una experiencia increíble. Había una conexión tan profunda allí. Es una amante maravillosa”, concluye Gary.