La campaña “Drive Safe Sunshine State”, traducida como “Maneje seguro”, promueve un proyecto de ley que busca otorgar licencias de conducir a los inmigrantes indocumentados que viven en el estado de Florida.

Este campaña es llevada a cabo por una coalición de organizaciones proinmigrantes, de derechos civiles, abogados, políticos, empresas e instituciones religiosas con el fin de aprobar la Ley de Transporte y Seguridad Vial de Florida (SB300).

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El senador René García, principal propulsor de esta campaña, aseguró que de aprobarse la ley se proporcionaría una licencia especial a aquellos inmigrantes que provean un Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN) por sus siglas en inglés) y documentación apropiada de sus países de origen.

“Los opositores piensan que es abrirle la puerta a los que no tienen documentos, esa no es nuestra motivación. La motivación es asegurarnos que estas personas estén manejando legalmente”, señaló.

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Según datos del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, hasta 730,000 indocumentados en Florida podrían beneficiarse con la aprobación de esta ley. Si un 50% de los inmigrantes obtienen licencias, el gobierno recibiría alrededor de 8.7 millones de dólares en ingresos.

El proyecto de ley SB300 será discutido en el Subcomité de Asignaciones de Transporte, Turismo y Desarrollo Económico del senado estatal luego del comienzo de la sesión legislativa en marzo.

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