El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pidió al Congreso un presupuesto de 15 mil 297 millones de dólares que se utilizarán para reforzar la seguridad fronteriza y la política migratoria.

Como se sabe, este incremento en la vigilancia fronteriza y la aplicación firme de políticas de restricción a la entrada de indocumentados forma parte del compromiso del mandatario para la aplicación de su decreto migratorio que permitirá que miles de inmigrantes indocumentados, que ya viven en EE.UU., no sean deportados.

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Según detalló el mandatario, la mayor parte del presupuesto se destinará a la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP) y el Servicio de Migración y Aduanas (ICE).

La primera contaría con un presupuesto de más de 9 mil millones de dólares, que se usarán para identificar a inmigrantes convictos con antecedentes criminales para que sean deportados, de igual forma se intensificarán las tareas policíacas para deportar inmigrantes indocumentados y el traslado de inmigrantes menores de edad que viajan solos.

Por su parte, al Servicio de Migración y Aduanas (ICE) se le brindará más de 5 mil millones de dólares. Este presupuesto deberá estar destinado a concluir la construcción de nuevos tramos del muro fronterizo, así como otros trabajos de infraestructura y adquisición de tecnología.

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