Lo peor que puedes hacer en una situación así es quedarte de brazos cruzados esperando a que las cosas se solucionen por sí mismas. ¿Qué hacer cuando te sientes bajo de ánimo?

1. En primer lugar, no te quedes en casa viendo la televisión. Aunque sientas pereza, anímate a salir a dar un paseo. Volverás a casa con otra perspectiva después de haber recargado las pilas a nivel físico y mental.

2. Hoy en día las nuevas tecnologías propician el contacto interpersonal más allá de la distancia. Utiliza estas tecnologías a tu favor. Si tienes un mal día no te quedes encerrado en ti mismo. Toma la iniciativa de llamar por teléfono a una persona de tu confianza, el simple gesto de escuchar una voz amiga al otro lado del hilo telefónico aporta una inmensa sensación de bienestar.

3. Alégrate el día gracias a pequeños detalles que pueden hacer de esta jornada un día más especial. Por ejemplo, puedes darte un capricho culinario ya que la gastronomía también es un auténtico placer emocional que puede animarte en un mal momento.

4. Cierra los ojos e imagina un momento de tu infancia que recuerdes con especial cariño. Imagina que tu yo infantil puediese hablar con tu yo adulto: ¿Qué se dirían en ese caso? Puedes realizar este ejercicio de imaginación para alimentar a tu niño interior.

5. Refuerza tu descanso, por ejemplo, puedes disfrutar de una siesta reparadora.

Por: Maite Nicuesa Guelbenzu, Coach en el blog de Mobifriends, red social ideal para buscar pareja y conocer amigos.