Jodie Smith, de 17 años, comenzó a tener dolores en el abdomen y su madre, Lesley, la llevó a un hospital en West Yorkshire, al oeste de Inglaterra, donde los médicos descubrieron que la joven estaba embarazada.

Horas más tarde dio a luz a su hijo Jack, un saludable niño que pesó 3,5 kilos.

La joven, bailarina de danza clásica, no tenía idea de que estaba embarazada ya que su panza no había crecido y tampoco había aumentado de peso.

“Ella ha estado yendo a la universidad, al trabajo, a sus clases de baile, al gimnasio, todo de manera normal, se mantuvo muy delgada hasta el final”, explicó la madre al diario Daily Mail.

Jodie comenzó a sentirse indispuesta con dolores de estómago el lunes pasado por la noche. “Le dije que tomara dos paracetamol, pero a la noche me volvió a llamar diciendo que todavía se sentía mal y que le había subido la fiebre”, contó Lesley, quien inmediatamente llevó a su hija al hospital.

Una vez allí, los médicos descubrieron rápidamente que Jodie estaba embarazada y en trabajo de parto, y la trasladaron a Pinderfields en Wakefield, donde dio a luz en la madrugada a su hijo Jack.

Como la joven no había tenido atención prenatal, no estaban seguros de qué etapa del embarazo estaba. Tanto su novio, Danny Yeoman, de 19 años, como varios de sus familiares, tuvieron que salir a comprar las cosas necesarias para el bebé.

La joven se recupera favorablemente y todavía sigue pensando en continuar estudiando danza en al universidad. “Mi familia está encantada con esta nueva incorporación, pero todavía están un poco abrumados”, concluyó al joven.