Se denomina a la inflación de los intestinos. Se manifiesta con un aumento del número de las deposiciones que se hacen usualmente y a veces una disminución en su consistencia. Aunque afecta a adultos y niños, en el caso de los menores de 5 años esta es la segunda causa de muerte.

Este mal mayormente se presenta como consecuencia de una infección y dura de 1 a 7 días. Para tratarla, muchos especialistas recomiendan el consumo de antibióticos y la administración de probióticos.

Los antibióticos ‘destruyen’ a las bacterias malas para la salud del niño y aquellas que no lo son, desequilibrando a los microorganismos que viven en el intestino. Por otro lado, los probióticos son las bacterias que devuelven el equilibrio y restauran la flora intestinal o microbiota. Entre estos, se destaca el Bacillus clausii, cuyas esporas cumplen su función a pesar de las complicadas condiciones del aparato gastrointestinal”, explica la Dra. Janetliz Cucho, gastropediatra del Instituto Nacional de Salud del Niño.

En ese sentido y para ayudar a los , la especialista brinda algunas recomendaciones esenciales frente a un cuadro de diarrea infantil severo:

  • Si el pequeño es lactante, no suspenderla.

  • Los antibióticos deben ser usados solo si el médico sospecha de una infección bacteriana.

  • Seguir las indicaciones del pediatra y consultar el mejor tratamiento.

  • No darle al pequeño bebidas rehidratantes deportivas.

  • Administrar al menor probióticos de fácil consumo desde el inicio de la diarrea. Eso sí, antes debe consultarse con el médico.