En algunas familias existe la costumbre de darse besos en la boca entre padres e hijos. Socialmente, los besos en la boca están reservados para el vínculo de pareja. Los piquitos son una manera de expresar amor de los adultos que conforman una relación y no de madres e hijos.

Algunos psicólogos afirman que hasta dentro de los 2 años puede no ser contraproducente, pero cuando los niños empiezan a sociabilizar, esta costumbre puede generar problemas porque el pequeño repite lo que hace en su casa, fuera de ella. Además las madres que le dan picos a sus hijos invaden su espacio sin darse cuenta de entrar en la intimidad de los más pequeños.

Recuerda que acariciar y abrazar a los hijos, sobre todo el primer año de vida los convierte en personas seguras de sí mismas, pero evita los besos en la boca, pues esto puede causarles traumas desde temprana edad.