Los susurros en la intimidad pueden ser el inicio de un ambiente inquietante con tu pareja, aunque en muchos casos, se convierte en un acto que produce vergüenza. Susurrar palabras sexys al oído de tu pareja puede hacer subir la temperatura, convirtiéndose en un truco que se aleja de lo rutinario haciendo que se amplíen los límites para la imaginación sexual.
Para algunas puede ser un acto sencillo, pero otras se mantienen al margen de ello. La idea es disfrutar del momento sin presiones y en un ambiente apropiado para los dos. Si eres nueva o no lo sueles practicarlo, no debes apresurarte. A través de cualquier palabra que te venga a la mente, puedes utilizar un tono sexy y provocativo.
La clave del éxito está en confiar en ti misma.
Si la relación con tu pareja es ya de tiempo y existe mucha confianza, atrévete a contarle tus fantasías. En medio de un momento íntimo saca a relucir tus historias, recuerda que tu pareja es la persona con la que debes tener mayor confianza, fortaleciendo el afecto.