Según un estudio 12 minutos son suficientes para determinar si estamos interesados en alguien. Es decir, basta menos de un cuarto de hora para descartar o aprobar a un posible pretendiente y, aunque, la cifra denote superficialidad no se trata de amor (o desamor) a primera vista, hay muchos factores que entran en juego: desde el aspecto a la voz pasando por el lenguaje no verbal.

Hasta 2000 parejas participaron en el estudio de AXA que revela los comportamientos más comunes de uno y otro género que suelen decepcionar al contendiente.

Así que basándose en las conclusiones y en las posibilidades de 12 minutos de cita la revista GQ reunió las claves para aprobar con nota el Test de Cooper de las relaciones:

Minuto 1:00 – Sonríe

Lo suficiente para que desee devolverte la sonrisa pero no tanto que como para resultar espeluznante. Más de la mitad de los encuestados consideran este gesto determinante a la hora de juzgar a su cita.

Minuto 2:00 – Cuida tu aspecto

Eso de ‘la belleza está en el interior’ aún no vale aquí. Esta es solo la fase en la que te fijas en unos zapatos horribles en el caso de ellas o unas uñas locas en el caso de ellos. Una camiseta poco afortunada, un estilo diferente al nuestro o un peinado anacrónico son cosas que estamos dispuestos a pasar por alto pero no ocurre con el olor corporal. Es la causa principal de rechazo para el 60% de los encuestados mientras un mal aliento puede hacer que hasta el 53% salga corriendo.

Minuto 3:00 – Sinestesia

El cebrebro asocia las sensaciones y, como demostró el perro de Paulov, las relaciones entre estímulo y respuesta pueden alterarse. Así que, de la misma forma que un animal puede reaccionar con un sonido que relaciona con alimentos, los humanos tendemos a vincular olores o sabores como momentos felices o agradables (o todo lo contrario). Un aroma atractivo, un entorno confortable o un sabor apetecible pueden seducir a la otra persona antes incluso de lo que lo intentemos nosotros.

Minuto 4:00 – Contacto visual

Decía Aristóteles que en el equilibrio está la virtud, el problema es que cada uno lo sitúa en un punto. ¿En qué punto mirarse fijamente a los ojos deja de ser terriblemente romántico para ser terrible a secas? Probablemente en ese punto en el que empiezan a dolerte los ojos o tienes la sensación de bizquear. Hasta un 58% (y no solo mujeres) quiere que le sostengan la mirada pero, como todo, con moderación.

Minuto 5:00 – El tono de voz

Aquí no hay nada que hacer, hay agraciados que han nacido con las voces de Frank Sinatra o Scarlett Johansson, otros que aprendieron a modularla y otros que tendrán que explotar cualquiera de sus puntos fuertes para evitar ser rechazados por ese 25% que valora MUY positivamente esa cualidad. Tranquil@, tienes muchas otras.

Minuto 6:00 – La regla de las tres preguntas

Olvida los ‘¿estudias o trabajas?’, los ‘¿qué tal tu día?’ (en serio, ¡olvídalos!) y los ‘¿cuál es tu sueño? hay tres cuestiones clave elegidas mediante un algoritmo, que según las matemáticas, determinarán la compatibilidad. Y son:

-¿Te gustan las películas de miedo?

-¿Has recorrido algún país en solitario?

-¿No sería genial dejarlo todo y vivir en un barco?

Minuto 7:00 – Eso que vibra… ¿es tu Whatsapp?

No se sabe qué es peor: la insistencia de los avisos o el hecho de que no dejes de mirarlo. Podías haberlo silenciado del todo pero al menos no lo has abierto ¿Lo has hecho? Game over.

Minuto 8:00 – El falso elogio

Hay dos tipos de halago: los sinceros y los que te hacen enarcar la ceja mental. Esos es mejor evitarlos. Sobre todo porque o son inútiles o perjudiciales pero nunca beneficiosos así que ¿para qué?

Minuto 9:00 – Entrevista de trabajo

Vale que lo del cronómetro añade presión pero tu tarea principal es mantener la calma… y evitar los interrogatorios: tanto bombardear a preguntas, como condensar tus respuestas o la cita se convertirá en un partido de tenis (el más aburrido del mundo). No hay respuestas correctas pero sí preguntas apropiadas y son las que propician la conversación y no un tercer grado.

Minuto 10:00 – No hables de tu ex

Nunca. Bajo ningún concepto.

Minuto 11 – Mide tus palabras

A razón de 200 palabras por minuto (ppm) de media en una conversación normal, en este intervalo tienes 2640 oportunidades de cagarla. Y si ‘¿qué tal te ha ido el día?’ no debería ser una opción (¿qué pasa con esa pregunta? ¡No tiene respuesta! ¿O de verdad quieres saberlo?) tampoco las palabrotas. Conclusión: lo bueno, si breve, dos veces bueno.

Minuto 12 – Intenta sorprenderla

En 12 minutos habrías podido sobrevolar el Empire State y ya te habrías asegurado el éxito. Sin embargo, si has logrado llegar hasta aquí sin helicópteros significa que algo has hecho bien pero no te confíes. En la mayoría de los casos lo hombres están dispuestos a dar una segunda oportunidad tras un mal encuentro pero las mujeres tenemos más reticencias así que aunque la primera impresión haya sido mala tienes el resto de minutos de la cita para cambiarla.

Fuente: Revista GQ