En el campo de la sexualidad no todo está escrito. Por eso, se recomienda estar relajado, improvisar y no abandonar las caricias, los besos, las palabras y aquellos gestos que en algún momento, lo hicieron vibrar de pasión. Explora posturas que te llevarán al cielo a tiy tu pareja.

La doma

Sorprende a tu pareja, siéntalo en una silla, móntate sobre él –en una de sus piernas como si estuvieras sobre un caballo- y comienza el juego de seducción. Esta posición permite que él pueda acariciar todo tu cuerpo, besarte e incluso morder tus pechos si así lo desea, además, de tocar el clítoris con sus dedos.

La adoración

Adopta la posición del perrito pero apoyándote en los antebrazos, mientras, él debe estar arrodillado por detrás. Esta postura aunque es clásica no deberías obviarla, porque es una fuente de placer para ambos, pues les permite una penetración profunda, además de experimentar un estimulo distinto.

La mariposa

El hombre debe estar sentado en la cama con las piernas abiertas y los brazos hacia atrás, tú debes sentarte sobre él e inclinar ligeramente el tronco hacia atrás, apoyando las manos en la cama. Esto permitirá que ambos controlen la actividad.

El cartero

En esta posición la mujer debe estar acostada en la orilla de la cama y el hombre arrodillado en el suelo o de pie, para que el miembro masculino quede a la misma altura que el de la mujer y pueda concretarse la penetración. Mientras él tiene la posibilidad de acariciar otras partes de la anatomía femenina.

No te vayas

La posición no te vayas se puede decir que es una variante del popular “69”, pues ambos se acostarán de lado, en direcciones contrarias. Es decir, si tu hombre tiene la cabeza hacia la cabecera de la cama, tú debes colocarte a su lado entrelazándote con tus piernas y brazos.

Para las más atrevidas

Estas son sólo alguna de las posiciones que el Kamasutra sugiere practicar para que el acto sexual no se vuelva una monotonía.