Ser transparente. “Si quieres verla, dilo. Si sólo quieres llamarla, hazlo. Si quieres una relación con ella, adelante. Si no estás seguro de tus sentimientos, lo mejor es dejarla en paz”.

Tomar decisiones. Una de las cosas que más amamos las mujeres es la seguridad. Un hombre asertivo, seguro de si mismo, transmite certeza.

Tener una opinión sobre los temas. Opinar es siempre importante, pero los hombres deben aprender a dejar en claro que se trata solo de su visión sobre un tema, sin imponerla. A las mujeres nos gusta que un hombre respete lo que pensamos y lo que piensan los demás.

Apoyar nuestra carrera y que se sienta feliz de nuestros logros. Dice della Casa que este es un aspecto muy valorado por las mujeres, ya que nos gusta sentir que nuestra pareja está orgullosa de lo que hacemos.

Regalarnos flores. No tiene que ser en nuestro cumpleaños o en el aniversario de boda. Un ramo de flores en un día cualquiera, además de sorprendernos, nos hace pensar que somos especiales para ellos.

Preguntarnos cómo estuvo nuestro día. Prestar atención a lo que le contamos a nuestra pareja y preguntarnos si necesitamos su apoyo para resolver algún conflicto o problema, ayuda más que decirnos lo que tenemos que hacer.

Si va a acabar con ella, acabar con claridad, respeto y dignidad. Un hombre que no se ande por las ramas o con la típica frase: “Necesito tiempo”. Si quiere terminar que lo haga pero sin mentiras.

Confiar. Y aquí entra el tema de los celos. Muchas mujeres deja de ver a sus amigos de toda la vida para que sus parejas no sientan celos o se sientan desplazados. La confianza, de ida y vuelta, es fundamental en cualquier relación.

No dejarnos esperando. Brenda della Casa es contundente en su consejo: “Llámala cuando dices que las vas a llamar, acompáñala donde dijiste que la ibas a acompañar y haz lo que prometiste que harías”. Eso es todo lo que pedimos.

Usar sabiamente las palabras. Un “te amo”, “disculpa” o “te llamaré” sólo deben ser dichos cuando lo sientan en serio.

Y en la intimidad… Para aquellos hombres que van al grano, así, sin más, la escritora de The Huffington Post remata: “Enfóquense en algo más que recrear esa película porno con la que siempre soñaron. Tómense su tiempo para hacer eso que a ellas le encanta de la forma más lenta y satisfactoria posible”.

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