A veces solemos confundir amor con capricho. El sentimiento que genera alguien de manera genuina es a largo plazo y permite crecer en la relación, mientras que el capricho suele ser una emoción que nos impulsa de manera más superficial.
¿Quieres saber de una vez por todas si estás enamorada o si es algo del momento? Averígualo aquí:
1. Dejas ver tu lado más vulnerable
Amar es mostrar tu lado más indefenso, ser uno mismo en cualquier circunstancia. En cambio, cuando es un algo pasajero nos preocupamos más por dar una buena apariencia y ocultar ciertos aspectos de nuestra vida.
2. Aceptas sus virtudes y defectos
Cuando se trata de amar aceptamos al otro con sus defectos y virtudes. Por el contrario, el capricho nos hace idealizar a la persona y no prestamos atención a sus demás hábitos.
3. El sentimiento es constante
El capricho tiene un periodo determinado, aunque tiende a ser muy intenso, pero dura poco. Sin embargo, el amor prevalece más allá del tiempo. Si pasan los años y sientes el mismo sentimiento por tu pareja que al comienzo está más que claro que sigues enamorada.
4. Tienen una conexión fuerte
Las parejas que se aman inmensamente tienen una conexión fuerte, tanto física como emocional. Cuando se trata de un capricho, lo que sentimos es atracción por el otro, que tiende a ser algo más vacío.