La mayoría de no solemos limpiar nuestras brochas después de usarlas, olvidando que muchas veces en ellas quedan restos de o se llenan del polvo del ambiente, por lo que al usarlas la siguiente vez podrían producirnos daños en la piel, entre otros problemas que te decimos a continuación.

1.- Bacterias

Usar tus brochas sin limpiarlas previamente puede hacer que las bacterias se alojen en tu piel sin que te des cuenta.

2.- Acné

Al no limpiar tus brochas, estas acumular suciedad y cuando las uses para maquillarte harán que tus poros se cierren y el acné empiece a aparecer descontroladamente.

3.- Irritación en la piel

La suciedad acumulada en tus brochas puede producir que tu piel se irrite, causándote enrojecimiento en el rostro.

4.- Envejecimiento prematuro

No cuidar adecuadamente tus brochas puede hacer que tu piel sufra de envejecimiento prematuro causando la presencia de arrugas desde muy joven.

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