1 Otro idioma: aprender otra lengua es uno de los mejores modos para conocer en profundidad a otra cultura, abrir tu mente a nuevas realidades y expandir tus horizontes culturales. Este pasatiempos mejorará tus habilidades comunicativas y favorecerá tu agudeza intelectual. Así que elige el idioma de la cultura por la que sientas más admiración y, ¡anímate!

2 Videojuegos: la mayoría de los videojuegos son violencia pura. Pero, hay algunos que son muy buenos para mejorar la coordinación y el funcionamiento cerebral. Asimismo, potencian la habilidad de tomar decisiones en situaciones críticas.

3 Adivinanzas y crucigramas: “adivina, adivinador: ¿qué hace la vaca cuando sale el sol?”. Estas preguntas, por más sencillas que sean, ponen a nuestras neuronas en funcionamiento, nos ayudan a prevenir la demencia y a mejorar la memoria. Ponte a prueba, ¿cuántas adivinanzas puedes resolver sin hacer trampa?

4 Rompecabezas: no te tomes el nombre de este juego de una forma tan literal. Y es que a pesar de su denominación un tanto amenazadora, los “rompecabezas” son muy buenos para la salud mental. Si este tipo de juegos no es de tu preferencia, también tienes la posibilidad de probarte en los crucigramas.

5 Coleccionar: no importa qué decidas coleccionar: monedas, sellos, insectos… Todas estas alternativas despertarán tu intriga y te estimularán a conocer el mundo que te rodea. Este beneficio no es menor; a fin y al cabo, la curiosidad ha sido, es y será la principal propulsora de las más grandes transformaciones.

6 Lectura: hay millones de libros en este mundo. Esto significa que tienes un gran número de posibilidades de viajar a otros mundos y enriquecerte con nuevas ideas. Esta práctica estimulará tu imaginación, mejorará tu ortografía, ampliará tu vocabulario, agudizará tu concentración y, por sobre todo, te asegurará un profundo disfrute.

7 Instrumento musical: la música es una pasión muy noble. Tanto escucharla, como crearla tiene innumerables beneficios. En este sentido, diversos estudios científicos han demostrado que tocar un instrumento musical ejercita la perseverancia, agudiza la coordinación y la concentración, y mejora las habilidades matemáticas.