Si buscabas poner una nota de color a tu vestido de novia, las colecciones de 2012 te brindan una oportunidad de oro para darle a tu boda un delicioso toque romántico y muy dulce. Cascadas de volantes, cuerpos bandeau, faldas de tul y tejidos abullonados que crujen a cada paso, y dan forma a una novia etérea.

Una primavera que recupera looks de inspiración recién horneados en la pasarela nupcial de Nueva York, y que cobran vida en las manos expertas de Carolina Herrera, y sus asombrosos vestidos en tonos blush, los looks en nude y vainilla de Monique Lhullier, o el delicado vestido color verde menta con cascada de flores a modo de falda firmado por Romona Keveza.

La guinda a esta tendencia con sabor a patisserie: las creaciones en azul y rosa de Oscar de la Renta, que se sumergen en el polo más opuesto al blanco puro tradicional, y añaden una romántica pincelada.