Una tarjeta clásica, por ejemplo, no dejará lugar a dudas a cerca de las tradiciones que dominarán el gran día, mientras que otras alternativas más modernas, como las invitaciones ecológicas, las de inspiración vintage o las hechas a mano, pueden poner sobre la pista a los invitados sobre cómo vestirse, el tono o el protocolo escogido.
Invitaciones ‘country’ de Mr. Wonderful
Los modelos de Mr. Wonderful hablan sobre la forma de ser de los novios, convirtiéndose casi en detalles personalizados que invitan a disfrutar por adelantado de un día mágico. La historia escondida detrás de este modelo: una boda íntima, en el campo, farolillos.
Invitaciones con sobre de espejo, de Studio Duermevela
En Studio Duermevela diseñan invitaciones personalizadas, cuidando tanto el relato de la historia de amor como los materiales, el tipo de impresión e, incluso, el presupuesto adaptado a cada pareja.
Invitaciones comestibles: tarritos de paté, de Molaría Comunicación
Una idea que seguro encantará a las novias más golosas son las invitaciones de Molaría Comunicación. Su secreto: incorporar un delicado tarrito de paté de perdices a la madrileña al parte oficial.