Jessica Vega, de 25 años engañó a su propio novio diciéndole que se estaba muriendo de leucemia, y que le quedaba menos de un año de vida. Así Jessica se casó con Michael O’Connell. La pareja pasó una exótica luna de miel en Aruba con donaciones de boletos de avión y una villa, informó Daily Mail.

Sus amigos donaron todo, desde el vestido hasta los gastos para las dos semanas que duraría la luna de miel en el Caribe para que la joven, pudiera disfrutar de un feliz inicio de casados antes de que la enfermedad acabara con su felicidad.

Pocas semanas después de regresar de su luna de miel, O’Connell, se dió cuenta de que la condición de su esposa no había deteriorado. Llamó por teléfono a la oficina del médico para hacer preguntas acerca de su cáncer, pero se llevó una gran sorpresa al enterarse de que Vega no era una paciente de cáncer.

La pareja se divorció y O’Connell se trasladó a Virginia en busca de trabajo.Vega ha negado inventar la historia del cáncer y dijo que ella y su esposo se separaron porque él era un abusador.