Valentino propone para la primavera-verano 2012 una solución ideal para las novias que estén pensando en casarse en el campo, la playa, o, sencillamente, busquen un zapato de verano para el día D, sin tener que optar por una sandalia o un tacón de varios centímetros.

La casa italiana se ha desmarcado con sendos modelos de calzado elaborados en macramé y encaje, que cumplirían las expectativas de cualquier Cenicienta, en forma de alpargatas y slippers con un pequeño tacón.

Las espadrilles, pertenecientes a la colección prêt-à-porter, están disponibles en tres colores: marfil, negro y rojo vibrante, uno de los colores it de la temporada, y combinan la suela de esparto tradicional con suntuosos tejidos bordados a mano, que hacen las veces de perfecto acompañamiento para cualquier vestido de novia corto o tobillero.

Por su parte, los slippers, uno de los tipos de zapato más cómodos del mercado, incorporan un pequeño tacón, y con ellos desfilaron las modelos en la presentación de la colección Haute Couture de la firma el pasado mes de enero en París.

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