El (tejido que cubre toda la pared interna del útero) es un tipo de neoplasia que cada vez cobra más víctimas. Se presenta cuando las células que están aquí empiezan a desarrollarse de forma descontrolada.

De acuerdo con la American Cancer Society (ACS), en el 2018, el 92% de los cánceres uterinos ocurrieron en este tejido. Este mal usualmente afecta a mujeres de 60 años en adelante, pero últimamente se está presentando en pacientes más jóvenes.

Por ello, Cleveland Clinic Florida da a conocer algunos factores de riesgo para tomar precauciones al respecto.

Sobrepeso

El 40% de los casos descubiertos se han presentado por exceso de masa corporal y obesidad.

Antecedentes familiares

Si tu madre o hermana ha tenido este mal las posibilidades de padecerlo en algún momento son muy altas. Lo mismo ocurre con aquellas mujeres que han tenido cáncer ovarios o de mama y con las que tienen síndrome del ovario poliquístico.

Nuliparidad

Las chicas que nunca han estado embarazadas tienen altas posibilidades de desarrollar esta neoplasia, pues están expuestas al estrógeno por un mayor tiempo.

Actualmente, existen distintos procedimientos para tratar el cáncer de endometrio. Sin embargo, estos no son suficientes, ya que los tumores vuelven a surgir y, en su nueva aparición presentan resistencia a los fármacos utilizados en la quimioterapia”, indica la Dra. Nicole Eiseler, M.D., médica oncóloga con subespecialidad en neoplasias ginecológicas en Cleveland Clinic Florida.