Dicen que debemos fijarnos en nuestros abuelos y abuelas para saber si de mayores estaremos gordos o calvos porque los genes que heredamos acostumbran a saltarse una generación.

No sabemos cuál es el aspecto actual de la descendencia de Audrey Hepburn, pero sí sabemos que le ha salido una nieta igual a ella, con la misma mirada de candidez y rostro de delicadeza que tanta fama otorgaron a la inolvidable actriz protagonista de Desayuno con diamantes.

Por desgracia, la nieta de Audrey Hepburn no parece tener demasiados recuerdos de su convivencia con una de las actrices más famosas del mundo: “Recuerdo haber visto una fotografía de ella saltando de un trampolín. Creo que esto sucedió antes de que yo comprendiera que ella era famosa. Recuerdo que pensé que ella tenía el aspecto de una persona a la que me gustaría haber tenido como amiga. De niña, no pude realmente establecer un vínculo con la Audrey Hepburn actriz. Para mí, ella era familia”.

Emma Ferrer asegura que, cuando vio Desayuno con diamantes, disfrutó la película como lo hubiera hecho cualquier otra chica. Lo más sorprendente de sus revelaciones son, quizás, las posesiones que conserva de la actriz: un jersey de cuello alto de cachemir y un osito de peluche.