Vogue publica una portada especial para su número del mes de abril, invitando a la princesa Charlotte Casiraghi a posar delante del objetivo del fotógrafo Mario Testino.

A sus 28 años, la heredera de los Grimaldi posa espectacular para una de las revistas más conocidas de Francia y es que con un aspecto dulce y aniñado conquista el objetivo de la cámara a pesar de haberse convertido en toda una mujer, además de una madre ejemplar.

“Sublime, deportiva, brillante, creativa, Charlotte Casiraghi encarna la figura de la mujer ideal”, dice Emmanuelle Alt, redactora jefe de Vogue París, en su editorial.

Constantemente fotografiada, a pesar de ella, Charlotte Casiraghi juega con su feminidad. La monegasca se toma su tiempo, posa, se desvela y ofrece al magazine unos clichés dignos de las grandes campañas publicitarias que ella misma ha protagonizado.