Un video publicado en muestra la sintonía perfecta que puede haber entre una bebé de tres meses y su padre, que en su calidad de músico empleó lo que mejor saber hacer para calmar a su hija y hacer que deje de lado una pequeña pataleta.

Lela, la protagonista del video, dejó de llorar al escuchar las melodías que sacaba su padre de una guitarra acústica, y al parecer le gustó tanto ese estilo de toque que rápidamente empezó a mover las piernas como si quisiera bailar.

Lo gracioso del video es que cuando el papá dejó de tocar, la pequeña amenazó con otra vez volver a llorar.

Mira aquí el video en YouTube:

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