El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha tenido un año difícil con las sanciones internacionales por Ucrania, la intervención rusa en Siria, las denuncias de dopaje contra su país, e incluso la injerencia en las elecciones de Estados Unidos (EEUU-USA), entre otros temas. Sin embargo, ha logrado mantenerse como la persona más poderosa del mundo de acuerdo al ranking difundido por Forbes.

El listado de Forbes incluye a 74 hombres y mujeres, que teniendo en cuenta sus recursos financieros y cargos, tienen decisiones que impactan en la vida de millones de personas. Son generalmente políticos y empresarios.

desplazó hace cuatro años al presidente de EEUU, Barack Obama, como el hombre más poderoso del mundo, y desde entonces no ha dejado el primer lugar del ranking de Forbes. ¿Por qué? De acuerdo al medio, esto se debe a haber extendido el alcance y la influencia de Rusia “a cada rincón del planeta”, y esto va desde Siria a Estados Unidos.

Forbes considera, muy aparte de la teoría que relaciona a Moscú y al propio Putin en el proceso electoral de USA en beneficio de Donald Trump, que el poder del “podría crecer de forma desmedida” en los próximos años al tener a un aliado en la Casa Blanca.

Asimismo, se destaca que pese a que las sanciones económicas y la crisis económica rusa han impactado negativamente en el nivel de vida de los rusos, Vladimir Putin sigue contando con una aprobación superior al 80% entre sus compatriotas.

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Vladimir Putin. (Foto: Getty Images)

EL CASO DONALD TRUMP

En 2015, Donald Trump ocupó el puesto 75 del listado de Forbes. Ahora el presidente electo de EEUU, ha saltado hasta la segunda casilla. Esto es debido a que el magnate “parece ser impermeable a los escándalos, tiene a ambas cámaras del Congreso a su favor y una fortuna personal de varios miles de millones”.

LA CANCILLER ANGELA MERKEL

La canciller alemana, Angela Merkel, quien asumió el cargo en 2005, ocupa el tercer lugar del listado de Forbes, repitiendo el plato como la mujer más poderosa del mundo, aunque ha bajado un escaño en relación con 2015.

Merkel, quien ha sido encargada de mantener a Europa unida tras el Brexit del Reino Unido, es considerada el “último bastión del poder liberal en Occidente”, ante el ascenso del populismo y los movimientos de derecha. Este año ha tenido que enfrentar la crisis de los migrantes y equilibrar la creciente influencia de Rusia.