:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/C65KYTFMKFBMXHJJFH7FDZDFJU.jpg)
La Policía investiga si la muerte de Paul Walker y Roger Rodas en un accidente automovilístico ocurrió durante una carrera de piques –conocidos como drag racing en Estados Unidos– contra otro vehículo, aseguró un investigador a la CNN. Esta, no obstante, es por el momento solo otra de las teorías sobre el hecho que ha enlutado a Hollywood.
Esta nueva tesis se sostiene en que la policía recibió el domingo –menos de 24 horas después del accidente– en la que se indicaba que otro auto estuvo en la escena cuando el lujoso Porsche Carrera GT en el que iban Walker y Rodas se estrelló contra un poste de luz y luego se incendió.
“Naturalmente, desde nuestro punto de vista de investigadores, debemos tener en cuenta si esta fue una de las razones del accidente”, dijo el sargento de la Policía de Los Ángeles Richard Cohen.
Incluso si no se trató de una carrera o de piques, los investigadores de Los Ángeles barajan la posibilidad de que otro auto se atravesó en el vehículo del protagonista de Rápidos y furiosos, quien también practicaba artes marciales, y ocasionó la colisión.
¿Error de fábrica o humano?
Una de las primeras versiones que circuló luego del accidente es que Rodas perdió el control del lujoso Porsche Carrera GT –valorizado en US$500 mil– antes de estrellarse. No obstante, el salvadoreño de 38 años era un piloto profesional, por lo que esta hipótesis parece improbable para los agentes.
En tanto, fuentes allegadas a Always Evolving, la tienda de venta de autos de carrera de Rodas y Walker, consideraron que lo más probable es que al Porsche se le derramó el líquido de dirección. Esto debido a que en la pista hay rastros de esta sustancia y las marcas de neumáticos tienen orientación recta.
