La Agencia Espacial Europea (ESA) lanzó hoy una nave experimental, un prototipo de vehículo reutilizable capaz de retornar a la Tierra por su propia cuenta.

El despegue, a bordo de un cohete Vega, fue desde el de Kurú, en la Guayana Francesa, y en los 100 minutos del viaje hasta su amerizaje en el Océano Pacífico se verificaron los avances en materia de aerodinámica, protección térmica y navegación automática.

Es la primera misión que experimenta en vuelo esos sistemas con un reingreso en la atmósfera completo, y servirá en el diseño de una futura nave autónoma y reutilizable, que ayudará a Europa a ser más independiente de Rusia y Estados Unidos en las misiones espaciales.

La parte más delicada del vuelo, contaron los expertos de la ESA, fue el propio reingreso, sometido a 1.700 grados de temperatura y en el que el ángulo de entrada es esencial, puesto que con uno muy pronunciado la nave puede arder y, si no es lo suficientemente profundo, no alcanzar el punto deseado de aterrizaje.