, el asesinado músico de la Banda El Recodo de Sinaloa, habría sido victimado en un crimen pasional, según la primera hipótesis.

Según medios mexicanos, una mujer y un hombre, acusados de participar en el homicidio, se encuentran detenidos.

El cadáver del trompetista, signos de violencia y un disparo en el cuello, fue en un descampado cercano al centro turístico de Mazatlán. La agrupación a la que pertenecía canta ‘narcocorridos’, un subgénero que exalta las acciones de traficantes de drogas.

El artista llevaba nueve días desaparecidos. El lugar donde fue encontrado el trompetista lleva a la comunidad El Recodo, donde nació la banda en los años 30. Desde entonces varias generaciones de músicos han mantenido viva a la orquesta, cuya popularidad llega al sur de Estados Unidos.