Unos 2.000 inmigrantes de África han muerto en lo que va del año al tratar de cruzar ilegalmente el mar Mediterráneo hacia Europa.

El número supera en 400 a la cantidad de fallecidos durante el mismo período en 2014. La mayoría de víctimas pereció en el canal de Sicilia, del trayecto que une Italia con Libia. Las causas de los decesos son por ahogamiento o porque las mafias los hacen viajar en pésimas condiciones.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) precisó que desde enero llegaron unos 188.000 a Europa, sobre todo a Grecia e Italia.

El Reino Unido es la meta de muchos de los refugiados, que intentan llegar hasta Calais, en el norte de Francia, para cruzar a Inglaterra por el llamado ‘eurotúnel’. En la zona hay duras medidas de seguridad.