La final de la entre Liverpool vs Sevilla se vio opacada antes del arranque del partido por una brutal pelea entre fans de ambos clubes en plena tribuna del estadio St. Jakob Park de Basilea.

Aunque no hubo detenidos, la policía suiza tuvo que ingresar al sector del enfrentamiento para separar a ambas parcialidades y evitar nuevos choques en el transcurso del compromiso.