El diálogo entre y Rusia sobre la entrega de las armas químicas en comenzó con tensión luego de que el secretario de Estado estadounidense, , asegurara que la opción de una intervención militar en el país del Medio Oriente sigue “sobre la mesa” si es que no se encuentra una solución rápida a la crisis.

Moscú y Washington acordaron reunirse a fines de septiembre en Nueva York para poner fecha a una conferencia de paz sobre Siria, mientras que hoy prosiguen las negociaciones en Ginebra sobre la , que la inteligencia estadounidense estima llega a las mil toneladas.

El jefe del Estado sirio, , aumentó la tensión en las negociaciones al asegurar que está dispuesto a ceder sus armas químicas solo si los Estados Unidos dejan de amenazarlos. Según indicó, la entrega se haría luego de un mes de firmar la convención internacional que prohíbe el uso de armas químicas, “el procedimiento estándar” de este tipo de operaciones.

Sin embargo, Kerry dejó claro que los EEUU esperan que la entrega sea en un plazo mucho menor, y aseguró que su país, que acusa al régimen de Assad de utilizar agentes tóxicos , no confía en la palabra del régimen sirio.

En medio del nerviosismo internacional por la situación en Siria, la marina rusa anunció la flota Mediterránea aumentaría a 10 barcos de guerra. Actualmente tienen siete naves en la zona, .