Brasilia. El ultraderechista juró el martes 1 de enero como nuevo presidente de por los próximos cuatro años. El capitán de la reserva del Ejército, que ganó las elecciones de octubre pasado con el 55% de los votos, reafirmó en su discurso ante el Congreso en la toma de mando que gobernará el país “sin discriminación o división”.

El flamante gobernante de la República Federativa de Brasil llegó hasta el Parlamento acompañado de su esposa, la desde ahora primera dama Michelle Bolsonaro, en medio de estrictas medidas de seguridad y de un imponente marco de gente que salió a las calles para felicitar y vitorear a su nuevo presidente.

En otra parte de su primer discurso como presidente de Brasil, prometió que durante su gestión atenderá a todos los ciudadanos que “desean conquistar por mérito buenos empleos y sustentar sus familias, y exigen salud, infraestructuras y respeto de los derechos fundamentales”.

Asimismo, dijo que impulsará el desarrollo de “buenas escuelas” para marcar el camino de las nuevas generaciones y prepararlas “para el mercado laboral y no para la militancia política”.

Afirmó, además, que en su mandato se honrará a “aquellos que sacrifican sus vidas en nombre de la seguridad”, en clara referencia a los cuerpos de seguridad del Estado. “Lo merecen y deben ser respetados”, anotó.

Dijo también que es necesario un ajuste fiscal para sanear las cuentas públicas, con el objetivo de sanear la economía local y promover su crecimiento y desarrollo.

Jair Bolsonaro, fiel a su estilo, prometió que liberará al país “de las amarras ideológicas”, con un pleno respeto “a las religiones y a las tradiciones judeo-cristianas”.

TAGS RELACIONADOS