Israel declaró muerto a , el soldado de 23 años que desapareció en la el viernes, causando que el cese al fuego anunciado poco antes colapsara.

Previamente, el Gobierno de Israel consideraba al militar como secuestrado por Hamas, acusación que la milicia islamista negaba.

El grupo radical declaró que había perdido el contacto con una de sus unidades en el área cercana a donde operaba Goldin y .

El anuncio causó escenas de dolor en la casa del soldado, ubicada en la localidad de Kfar Saba, . Frente al domicilio se habían reunido decenas de personas para expresar su apoyo a la familia.

La muerte de Goldin eleva la cifra de israelíes muertos a 66, dos de ellos civiles. Mientras tanto, unos 1.670 palestinos han muerto desde el 8 de junio, la mayoría de ellos no combatientes.