Enrique Peña Nieto reconoció que la masacre de los 43 estudiantes de Iguala ha sacudido las instituciones de México y aumentado la desconfianza de la sociedad.

“El caso de Iguala nos ha cimbrado a todos. Nos ha cimbrado a las instituciones, ha cimbrado a la propia sociedad. México debe ser otro a partir de lo ocurrido en Iguala”, observó el en un discurso ante ministros, gobernadores estatales y representantes de la sociedad civil.

Peña Nieto aún no supera la peor crisis de su gestión, iniciada en 2012, a raíz del secuestro de normalistas de perpetrado el 26 de septiembre en Iguala por policías y sicarios del cártel Guerreros Unidos. Los restos de uno de los jóvenes fueron encontrados calcinados en una fosa cercana a la zona.

“Debe llevarnos a todas y todos a emprender ajustes y hacer de estos hechos tan lamentables una oportunidad para reconducir, reforzar y fortalecer las instituciones de seguridad pública”, acotó.