Varios meses después de abandonar el rodaje de Game of Thrones, Jack Gleeson reveló que fue horrible grabar sus últimas escenas como el rey Joffrey.

Según informó CinemaBlend, el confesó que no podía mantener los ojos abiertos por mucho tiempo cuando su personaje ya había muerto envenenado en la . Por esa razón, el director del capítulo y el director de fotografía hicieron una captura de sus ojos abiertos para reemplazarlos con CGI.

“Así que ese es mi nivel de ineptitud”, reconoció Jack Gleeson.

En la escena en mención, el rey Joffrey muere envenenado el día de su boda y para grabar su plano final, la cámara debía enfocar de cerca los ojos abiertos de su cadáver. La misión del actor de 22 años era no parpadear, pero no pudo.

Jack Gleeson contó esta historia en el detrás de cámara del DVD de la cuarta temporada de Game of Thrones.

Similar problema atravesó Mark Stanley, quien encarnó a Grenn en Game of Thrones. Según relató, tampoco podía mantener los ojos abiertos cuando sus compañeros de la Guardia de la Noche encuentran su cadáver en el túnel tras la lucha con un gigante.

La quinta temporada de Game of Thrones se estrenará el próximo 12 de abril a través de HBO a nivel mundial.

ASÍ FUE LA MUERTE DEL REY JOFFREY