La se agitó con la denuncia de corrupción de un exdirector de la compañía estatal Petrobras contra altos funcionarios del Gobierno de la presidenta , candidata a la reelección que enfrentará en los comicios del 5 de octubre a , favorita en las encuestas para la segunda vuelta.

Entre los señalados por el exfuncionario Paulo Roberto Costa se encuentran los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado, Henrique Eduardo Alves y Renan Calheiros, respectivamente, los dos del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), según informó el semanario . Esta agrupación es la principal aliada del oficialista e izquierdistas Partido de los Trabajadores (PT).

Costa, antes encargado del área de Abastecimiento y Refinería de la empresa energética, preso por presuntos nexos con una red de lavado de dinero, contrabando, narcotráfico y evasión de impuestos, reveló información a cambio de reducir su pena que podría ser de hasta 30 años.

Otros acusados son el tesorero nacional del PT, Joao Vaccari Neto; el ministro de Minas y Energía, Edison Lobao; el exgobernador de Río Sergio Cabral y la actual gobernadora de Maranhao, Roseana Sarney, estos tres también del PMDB. Asimismo, el excandidato del Partido Socialista Brasileño (PSB) Eduardo Campos, fallecido en un accidente aéreo el 13 de agosto.

Según Costa, estos recibían el 3% de comisión sobre el valor de cada contrato firmado durante su gestión en la firma, entre los años 2004 y 2012. ¿Cómo afecta la denuncia a Dilma Rousseff? La mandataria presidió el Consejo de Administración de la mayor empresa estatal brasileña de 2003 a 2011.