Las autoridades de redoblaron la seguridad en torno a la nunciatura vaticana en El Cairo, ubicada en el acomodado barrio de Zamalek, donde el se alojará este viernes con motivo de su visita de dos días al país árabe.

La policía vigila la calle principal donde se ubica la sede diplomática, al comienzo de la cual se ha establecido un control de seguridad, junto a otros en los accesos a Zamalek, que se ubica sobre una isla en el río Nilo.

En la zona se encuentran muchas otras embajadas extranjeras – incluida la de España y de varios países latinoamericanos – y es considerada una de las más seguras de la capital de Egipto, que ha sido escenario de ataques terroristas aislados, el último y más sangriento contra una iglesia copta ortodoxa el pasado diciembre.

El Gobierno egipcio quiere prevenir y evitar cualquier incidente durante la visita papal los días 28 y 29 de abril, que el pontífice decidió mantener a pesar de los atentados contra dos iglesias del norte del país el pasado Domingo de Ramos, en los que fallecieron casi medio centenar de personas.

Desde el día de ayer, 25 de abril, los vehículos no pueden aparcar en las principales vías de Zamalek por donde previsiblemente el pontífice pasará y hay varias calles cortadas al tráfico, además de un amplio despliegue policial en los alrededores de la nunciatura, coincidiendo con la visita, tal y como pudo constatar Efe.

Además, empleados estatales han limpiado y barrido las aceras y calles, donde suele haber basura y todo tipo de objetos tirados, y los muros que rodean la nunciatura, un imponente edificio a la orilla del Nilo, han recibido una mano de pintura.

A medida que se acerque la fecha de la visita, se espera que se refuercen las medidas de seguridad y sean tomadas mayores precauciones, ya que el pontífice se desplazará por la megalópolis de El Cairo para participar en los encuentros y eventos que componen su muy apretada agenda en Egipto entre las 14.00 horas locales del viernes y las 17.00 horas del sábado.

Fuente: EFE