El (ICE) reportó que durante 2013 deportó a 368 mil 644 personas.

Según ICE, el 98% de las deportaciones cumplieron con las condiciones de prioridad que persiguen las autoridades estadounidenses, es decir, inmigrantes con antecedentes criminales o que recién ingresaron ilegalmente al país.

De las 368 mil 644 personas deportadas, 235 mil 93 fueron detenidas cuando o poco después de que trataban de ingresar de forma ilegal a . Las 133 mil 551 restantes fueron detenidas dentro de territorio estadounidense.

De acuerdo con el reporte del ICE, casi el 60% de las deportados habían sido previamente condenado por algún delito. Lo que significa que los deportados con record criminal aumentaron 82%, en comparación al año interior.

El director encargado del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, John Sandweg, destacó las cifras y sostuvo que las mismas demuestran que hay énfasis en deportar a personas con antecedentes penales.

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