Ante el desorden y las críticas en los primeros días de implementación del servicio de buses en el , la alcaldesa de Lima, , insistió en su pedido de paciencia a los usuarios de los vehículos que circulan por las avenidas Tacna, Garcilaso y Arequipa.

“Es un pequeño sacrificio que hay que hacer, porque nos estamos acostumbrando a un nuevo sistema para ganar un bien mayor. Sé que no es fácil, pero les pido que hagamos juntos este proceso de aprendizaje”, manifestó la también candidata a la reelección.

Villarán resaltó que se ha logrado que 71 de cada 100 usuarios regulares de ese corredor conozcan cómo opera el sistema y ya saben cómo ordenarse. La burgomaestre aseguró que con 125 buses se pueden manejar los intervalos de circulación, pero hoy se registró una sobredemanda porque el servicio todavía es gratuito.

“Una vez que se estabilice este corredor vendrán los de (la avenida) Javier Prado, las dos Panamericanas (norte y sur) y luego San Juan de Lurigancho hasta la avenida Brasil, y todo habrá cambiado hasta que en dos años lleguemos a las rutas no atendidas”, añadió.

Hoy, desde las 6 am, se formaron largas colas de cientos de pasajeros en los paraderos de las avenidas Tacna, Garcilaso y Arequipa, entre el Cercado de Lima y Miraflores. Por la falta de buses alimentadores, cuya implementación todavía no comienza, algunos usuarios tuvieron que caminar más de lo usual.

El presidente de Protransporte, Gustavo Guerra García, reconoció que en su primer día hábil los problemas en el Corredor Azul eran de esperarse. “Hemos tenido 118 vehículos funcionando que han reemplazado a 4.000 cúster y obviamente lo que tenemos que resolver es que hemos tenido un nivel de colas más largas de las que esperábamos”, observó.