El consumo de alimentos que contienen grasas saturadas no es el principal motivo de las enfermedades cardiovasculares. Por el contrario, la falta de este tipo de grasa aumenta los riesgos de sufrir males cardíacos, informó .

De acuerdo a un estudio, el 75% de las personas que sufren infartos agudos tiene un nivel de colesterol normal. Asimismo, la medicación con estatinas, un fármaco para disminuir el colesterol, genera efectos como trastorno estomacal y de sueño.

Desde un estudio de en 1970, en el que se concluye que hay una correlación entre las enfermedades coronarias y la grasa saturada, el consumo de ha sido satanizado. Sin embargo, la fuente de la grasa saturada puede ser importante.

Uno de los primeros experimentos en torno a la obesidad, publicado por la en 1956, demostró que las personas que más peso perdieron fueron las que consumieron grasa.