Una empresa canadiense ha presentado un traje masculino de tres piezas que permitiría en teoría al usuario caminar literalmente a través de una ráfaga de balas.

La compañía utilizó nanotubos de carbono para absorber el impacto de las balas disparadas desde pistolas y evitar los pinchazos y cortes de los ataques con cuchillo.

El traje, que cuesta 20.450 de dólares, proporcionará a los clientes una garantía de no ser asesinados, mediante disparos o puñaladas, cuando viajan al extranjero.

“Nos hemos enfocado en hacer el traje de James Bond,” dijo David Tran, director del departamento de proyectos especiales de Garrison Bespoke, citado por The Daily Mail. La empresa contactó a contratistas que ya han proporcionado chalecos antibalas a las Fuerzas Especiales de Estados Unidos en Irak.

Tran explica que dichos trajes serán muy útiles en el siglo XXI: “Una gran cantidad de hombres en el sector financiero, o la minería y el sector de hidrocarburos han confesado que cuando están en lugares peligrosos, se sienten realmente al límite, se sienten muy nerviosos cuando están ahí. Estas cosas afectan su rendimiento durante una reunión estratégica de alto nivel”.

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