El proceso de beatificación del arzobispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero, asesinado en 1980 por denunciar abusos a los derechos humanos en el país, “está llegando a la fase final”, afirmó hoy el obispo auxiliar de San Salvador, Gregorio Rosa Chávez.
Según el religioso, el papa Francisco “está muy contento” con el caso de Romero. “Quiere decir que estamos llegando al final del proceso, así es que esperamos en Dios que pronto tendremos a monseñor Romero en los altares”, expresó. El viernes, el obispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, se reunió con el Sumo Pontífice.
En el encuentro, le entregó a Francisco una carta sobre Romero firmada por los líderes de la Iglesia católica de El Salvador. “Estamos llenos de gozo y gratitud porque es una noticia que alegra a todo el país, incluso a gente que no es católica, incluso a gente que no es creyente, y alegra al mundo entero porque es un santo de alcance universal”, añadió.
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Romero fue asesinado el 24 de marzo de 1980 por un francotirador mientras oficiaba una ceremonia en la capilla del hospital de cáncer La Divina Providencia, en San Salvador.
El primer paso de la canonización de Romero comenzó en 1990. Su proceso de beatificación fue desbloqueado en abril de 2013 por Bergoglio, luego de permanecer por varios años estancado en la Congregación para la Causa de los Santos.