El grupo B del Sudamericano Sub 20 era el más apretado. En el grupo A las cosas se resolvieron con mayor claridad, pero las fuerzas eran parejas más parejas en el B.

Ecuador esperaba un triunfo brasileño o peruano. El empate lo dejaba, en el mejor de los casos, en un sorteo con Brasil para definir quien quedaba como tercero.

El primer gol peruano fue celebrado, pero sabían o presentían que Brasil podía igualar y poner en peligro el cupo ecuatoriano en el hexagonal. Cuando llegó el segundo gol, llegó también la tranquilidad y la hora de celebrar.