, director deportivo de la Federación Peruana de Fútbol, conversó largo y tendido con Rpp y contó más de un detalle sobre los antiguos problemas que aquejaban al fútbol peruano.

“Habían muchas cosas, pero para resumir […] no trabajo para sacar jugares. Nosotros pensamos que iba a brotar como paso con nosotros. Tuve la suerte la suerte de estar ahí”, declaró.

Fue claro Oblitas en explicar cómo es que el Perú decayó en su juego tras malas gestiones deportivas y administrativas por parte de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) durante años.

“Mientras que en otros países trabajaban, nosotros dejamos de hacerlo. Si a eso se le suma un mal trabajo federativo, en la gestión que tenía que tener la FPF para la modernización del fútbol, origina esta cultura negativa que tuvimos durante tanto tiempo”, contó.

“Eso no sucedió ahora. Yo converse con Ricardo Gareca sobre todos los errores que habíamos tenido. Y ahora se está haciendo una gestión distinta a la de antes. Y no son cosas entreordinarias, sino lo normal”, agregó Juan Carlos Oblitas.

Decisión crucial en la era Gareca

Cuando se le preguntó por cuál fue el momento clave en las Eliminatorias para conseguir la clasificación, Juan Carlos Oblitas confirmó que el probar a jugadores novatos en la Copa América Centenario significó un nuevo punto de partida.

“Sin lugar a dudad el cambio de chip viene cuando Ricardo Gareca toma la decisión de ir a la Copa América Centenario con muchos jugadores del medio local, jugadores que no había tenido la oportunidad de llega a la selección”.

Eso sí, para el director deportivo, en la Selección Peruana nunca hubo argolla, pero sí malas costumbres que nunca se dejaban de lado hasta que Ricardo Gareca decidió hacerlo.

“Este grupo entendió lo que quería Ricardo Gareca y los resultados empezaron a acompañar. No es casualidad porque fue una decisión”, contó.

“Nunca hubo argollas, esa palabra la hemos utilizado demasiado y no había acá. Había costumbres […] costumbres de estar con los mismos jugadores así ganemos op perdamos. Y para ganar hay que cambiar. Se tenía que hacer una revolución y Ricardo Gareca lo entendió en un momento que fue justo”, puntualizó.