La , último campeón del mundo, se marchó de tras caer este martes de manera agónica ante Corea del Sur por 2-0, un marcador posible solo en el tiempo añadido, cuando los dirigidos por Joachim Löw buscaban de manera desesperada un gol que los clasifique a octavos de final.

El equipo alemán, que se inclinó con justicia en su debut ante México (1-0) y superó casi de milagro a Suecia (2-1) en la segunda jornada, sucumbe así a la llamada ‘maldición del campeón’ y no podrá defender su corona el próximo 15 de julio en el estadio Luzhniki de Moscú.

Dos goles en el tiempo de descuento de la segunda mitad, uno de Kim Young-Gwon (m.92) otorgado por el VAR y otro de Son Heung-min (m.96) tras un fallo clamoroso de Manuel Neuer en el centro del campo, hundieron a la ‘Mannschaft’ y rescataron el honor de Corea, que se va del Mundial por la puerta grande.

La derrota de México ante Suecia, partido que se jugaba a la par, les daba alas a la selección alemana, pero la mala fortuna y poca efectividad de cara al arco le pasaron factura.