La selección de Rusia es uno de los equipos más discretos de Europa, a pesar de clasificar primeros en el grupo “F”, por encima de Portugal, en el mundo no los ven como un equipo que pueda destacar en Brasil 2014.

Rusia clasificó primero con 15 puntos. En las primeras fechas la rivalidad con Portugal era pareja en puntos. Hasta que el 12 de octubre del 2012 chocaron en Moscú y los locales ganaron por la mínima diferencia, con gol del joven Alexander Kerzhakov.

Ese resultado, en la tercera fecha, fue clave para los rusos, ya que en la siguiente jornada Portugal no pudo ganar y Rusia le sacó una ventaja de 5 puntos, que les hizo mantener mayor confianza a lo largo de la clasificación.