No pudo llevarse el título mundial, pero eso no importó para que la FIFA lo eligiera como el mejor jugador del mundial. Hablamos del único Ronaldo, el más grande.

Ronaldo, aparte de ser goleador, lo que más llamaba la atención del jugador era su juego vistosos, su atrevimiento de siempre ir para adelante llevando un sinnúmero de rivales regados a sus pies. En la competencia logró marcar 4 goles.

El mejor jugador joven se lo dieron al pequeño desequilibrante Michale Owen, quien realizó uno de los mejores goles del mundial ante Argentina. La bota de oro se la dieron a Davor Suker, quien fue el goleador del mundial con 6 tantos. Suker llevó a su país (Croacia) al tercer puesto del mundial.